La sesión plenaria culminará con una cita a puerta cerrada que requiere el compromiso de confidencialidad entre los asistentes. Esta convocatoria, que se celebrará tras el encuentro principal, busca tratar temas sensibles que exigen discreción. La necesidad de mantener en secreto lo discutido subraya la importancia y delicadeza de los asuntos a tratar.
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