El euríbor, indicador esencial para el cálculo de las hipotecas en España, ha experimentado un inesperado repunte después de meses de disminuciones continuas. Al cierre de septiembre, el índice superó el 2,16 %, marcando su segundo aumento consecutivo y poniendo fin a una racha bajista que se prolongó durante más de dos años.
Carlos López, representante de Euribor.com.es, sostiene que el índice ha «tocado suelo». Se anticipa un periodo de estabilización a corto plazo, con una proyección de tendencia alcista a largo plazo. Esta situación se ve reflejada en las acciones del Banco Central Europeo (BCE), que ha decidido mantener los tipos oficiales en el 2 %, sugiriendo una «pausa» en lugar de futuras reducciones.
Con la inflación bajo control y un crecimiento moderado en la eurozona, las predicciones oficiales señalan que el euríbor terminará el año cerca del 2,2 %, manteniéndose en torno al 2 % durante los próximos dos años. Según previsiones nacionales, para finales de 2025 el euríbor a 12 meses se situará en el 2 %, y en el 1,9 % en 2026.
El panorama actual es algo más favorable para los hipotecados. Aquellos que ajusten sus préstamos en otoño podrían ver una ligera disminución, ya que el euríbor en septiembre de 2024 se ubicó en 2,936 % y en diciembre en 2,436 %. No obstante, estas reducciones son cada vez menores y se espera que desaparezcan para 2026. Euribor.com.es advierte que estas podrían ser las últimas revisiones a la baja significativas.
Tomando como ejemplo una hipoteca estándar de 150.000 € a 25 años con un diferencial del 1 %, esta podría reducirse de unos 742 € a 723 € mensuales. Aunque se trata de una disminución menos pronunciada en comparación con trimestres anteriores, aún representa un alivio.
El futuro inmediato del euríbor parece dirigirse hacia una estabilidad prolongada. Tras las fluctuaciones de los últimos años, con incrementos en 2023 y descensos en 2024 y 2025, se prevé que la estabilidad se mantenga. Las proyecciones para 2026 y 2027 indican que las cuotas hipotecarias cambiarán mínimamente, sin grandes variaciones esperadas.
Este escenario sugiere una relativa calma para las familias con hipotecas. Aunque las revisiones no traerán sorpresas importantes, las notables reducciones de meses anteriores también desaparecerán, ya que el euríbor entra en un periodo de estabilidad alrededor del 2 %, alejándose de los extremos de la última década.