España enfrenta un caos debido a un apagón masivo que afectó a toda la Península Ibérica, dejando sin electricidad y comunicaciones a millones de personas por horas. Aunque el suministro eléctrico se ha restablecido en un 99%, el origen del incidente sigue siendo un misterio. Las consecuencias del apagón fueron particularmente severas, afectando transportes, hospitales y servicios públicos. En una comparecencia, el gobierno prometió recuperar la normalidad y agradeció a Francia y Marruecos por su ayuda. Interior ha desplegado miles de agentes para garantizar la seguridad, mientras que diversas zonas continúan trabajando para volver a la normalidad. Algunos líderes, como Isabel Díaz Ayuso, han criticado la falta de explicaciones por parte del gobierno.
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