Durante la noche, las defensas antiaéreas rusas derribaron 50 drones ucranianos en las regiones fronterizas de Belgorod, Voronezh y Rostov, según reportó el Ministerio de Defensa de Rusia en Telegram. En detalle, 41 drones fueron eliminados sobre Belgorod, cinco en Voronezh y cuatro en Rostov, sin que se informaran víctimas o daños materiales. Rodión Miróshnik, embajador especial ruso, calificó los ataques como una respuesta «histérica» de Ucrania al inicio del diálogo entre Donald Trump y Vladímir Putin. A su vez, mencionó que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y sus aliados están descontentos con estas conversaciones. Ucrania ha mantenido ataques con drones, principalmente dirigidos a infraestructuras como refinerías de crudo y depósitos de combustible, en respuesta a la ofensiva rusa en la región del Donbás.
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