La vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, enfrenta críticas por su gestión de denuncias de acoso sexual contra su asesor de seguridad, Jhon Ruiz. A pesar de su firme condena al machismo y su solicitud de renuncia al acusado, Márquez organizó una reunión entre las denunciante y Ruiz, contraviniendo protocolos habituales. La revista Semana reveló la situación, generando polémica sobre el manejo del caso y el papel de Márquez, también ministra de Igualdad. En su defensa, la vicepresidenta justificó la selección de Ruiz, un coronel retirado, como jefe de su seguridad por confianza, debido a las constantes amenazas contra su familia. Ruiz, un oficial afroamericano con una destacada trayectoria policial, niega las acusaciones, calificándolas de un complot para su destitución. Mientras tanto, Márquez se ve obligada a nombrar un nuevo jefe de seguridad.
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