En un épico enfrentamiento en Roland Garros, Carlos Alcaraz y Jannik Sinner protagonizaron la final más larga de la historia del torneo, con una duración de cinco horas y veintinueve minutos. En un duelo que marcó el inicio de una nueva era tras el dominio del «big three», Alcaraz logró remontar después de estar dos sets abajo y salvar tres puntos de partido, mostrando una resistencia mental y física extraordinaria. Con solo 22 años, Alcaraz ya ha alcanzado su quinto Grand Slam, igualando al mítico Rafael Nadal a la misma edad. Más allá del talento, Alcaraz promueve un enfoque más alegre y menos sacrificado hacia el tenis, desafiando las tradiciones de dedicación extrema en el deporte. Su actitud, que prioriza la diversión y la salud mental, está inspirando a una nueva generación de deportistas.
Leer noticia completa en El Pais.