La Demarcación de Guadalajara del Colegio Oficial de Arquitectos de Castilla-La Mancha clausuró con éxito el ciclo de conferencias titulado «Guadalajara, la ciudad que queremos», destacando la intervención del arquitecto y catedrático Miguel Ángel Baldellou. Su apasionada disertación sobre la relación intrínseca entre ciudad y patrimonio tuvo lugar en el emblemático Archivo Histórico Provincial, con la presentación de Patricia García Caballero, presidenta de la demarcación, quien recordó con admiración los años en los que fue alumna de Baldellou.
El arquitecto centró su exposición en la necesidad de los arquitectos de crear espacios urbanos habitables que preserven el patrimonio, alertando sobre los peligros de la degradación urbana. «Los arquitectos, en muchos casos, somos colaboradores necesarios en esa degradación, cuando deberíamos ser lo contrario», manifestó con convicción.
Destacó también el rol esencial de los colegios profesionales para enfrentar los retos urbanos y la importancia de la participación profesional en los debates públicos. «El patrimonio va más allá de los edificios monumentales. Es el aire que se respira, el sonido de sus calles, el sentido del vacío», explicó, invitando a la ciudadanía a sentir su ciudad como un ente propio que merece cuidado y atención.
Esta conferencia puso fin a un ciclo que exploró distintos enfoques para mejorar la ciudad, incluido el innovador modelo de «supermanzanas» presentado por el urbanista Salvador Rueda. También, el economista José Antonio Herce San Miguel abordó la relevancia económica y estratégica de las ciudades intermedias, como Guadalajara.
Miguel Solano, vocal de la Demarcación, señaló que el urbanismo es un pilar fundamental para la convivencia, mientras que Patricia García Caballero reafirmó que el patrimonio comprende tanto lo antiguo como lo que otorga identidad a los espacios urbanos. El evento culminó con las palabras de la decana del COACM, Elena Guijarro, quien felicitó a la demarcación por el éxito del ciclo y la calidad de sus ponentes.
