En un histórico encuentro en el municipio malagueño de Parauta, la consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Catalina García, junto al consejero de Medio Ambiente y Turismo del Gobierno de Aragón, Manuel Blasco, sellaron un protocolo de colaboración interregional para reforzar la conservación del pinsapo (Abies pinsapo Boiss). Esta iniciativa busca mejorar la gestión y promover la conservación de este abeto emblemático del Mediterráneo occidental mediante un marco de cooperación compartido entre ambas comunidades autónomas.
El acto se llevó a cabo en la emblemática finca «La Nava de San Luis», dentro del Parque Nacional Sierra de las Nieves, un importante refugio para el pinsapo. Este protocolo abre la puerta a la cooperación técnica en selvicultura, ordenación forestal y producción de material reproductivo del pinsapo, así como al desarrollo de proyectos conjuntos y celebraciones de jornadas científicas. Catalina García subrayó el paso fundamental que representa esta iniciativa hacia una gestión más coordinada de esta joya botánica y destacó la relevancia de fortalecer la colaboración entre regiones comprometidas con la biodiversidad y sostenibilidad forestal.
Se establece la creación de una Comisión de Seguimiento con representación equitativa de ambas regiones para supervisar el cumplimiento de los compromisos, proponer nuevas iniciativas y resolver interpretaciones del acuerdo. Esta alianza es impulsada por la necesidad de conservar no solo en su hábitat natural, sino también en nuevos territorios como los de Aragón, donde una histórica repoblación situada en Orcajo se añadió recientemente al Catálogo Nacional de Regiones de Procedencia.
En el contexto de este pacto, Andalucía se prepara para lanzar el Programa de Actuación 2025-2030 para la conservación del pinsapo, presentando una estrategia integral que abarca desde la gestión forestal hasta la restauración ecológica y la vigilancia de amenazas. Este plan ambiciona reforzar la resiliencia del pinsapo y asegurar su futuro, integrando la colaboración público-privada para ampliar y conectar los hábitats disponibles para la especie.
En los últimos años, la Junta de Andalucía ha invertido 5,9 millones de euros en tratamientos especializados para los pinsapares, recuperando bosques y reforzando reforestaciones en áreas como Sierra Bermeja, afectada por incendios recientes. La importancia del pinsapo trasciende su valor ecológico, representando una riqueza natural y un legado evolutivo que, en palabras de García, solo puede preservarse mediante esfuerzos conjuntos y la gestión comprometida de los bosques. Para fomentar este compromiso, la Junta impulsará actividades educativas dirigidas a administraciones, entidades y comunidades locales, asegurando que la protección del pinsapo esté profundamente arraigada en la identidad colectiva andaluza.
Fuente: Junta de Andalucía.
