Hace un siglo, Werner Heisenberg se refugió en la isla de Helgoland, donde formuló principios de la mecánica cuántica que impulsaron una revolución en la ciencia y la tecnología. En 2025, este avance es celebrado por la ONU como el Año Internacional de la Ciencia y la Tecnología Cuánticas, reconociendo su impacto en la electrónica, farmacología y más. Sin embargo, la aplicación de la mecánica cuántica enfrenta escepticismo y entusiasmo. Expertos como Jim Al-Kahalili destacan su potencial transformador, comparándolo con la inteligencia artificial. La computación cuántica, aunque prometedora, sigue en desarrollo, enfrentando desafíos significativos. Mientras algunos científicos, como José Luis Salmerón, permanecen cautelosos, otros celebran cada avance, como el reciente anuncio del Laboratorio Nacional de Oak Ridge sobre su primera computadora cuántica basada en diamantes.
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