El encuentro de ajedrez celebrado el pasado 16 de noviembre cautivó a los aficionados del deporte, gracias a la fina estrategia desplegada por los jugadores que rivalizaban en el tablero. La partida, descrita por expertos como una demostración de orfebrería ajedrecística, dejó a los espectadores al borde de sus asientos, mostrando un emocionante equilibrio entre agresividad calculada y defensa impecable. Las jugadas estratégicas de ambos contendientes llevaron al límite la competición, evidenciando un elevado nivel de preparación y talento innato, y proporcionando una clase magistral de ajedrez ante el público presente y los espectadores que siguieron el evento vía transmisión en línea.
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