El fiscal de Los Ángeles, Nathan Hochman, ha presentado los primeros cargos contra diez personas acusadas de saqueo en áreas afectadas por incendios devastadores. Nueve de los detenidos fueron arrestados por robar propiedades evacuadas, incluidas una mansión en el cañón de Mandeville y una casa en Altadena, donde hurtaron un premio Emmy. El valor de los objetos robados asciende a 200.000 dólares. Tres de los acusados, con antecedentes penales, podrían enfrentar penas severas, incluso cadena perpetua. Además, un individuo ha sido acusado de provocar un incendio en Azusa, no relacionado directamente con los siniestros actuales, y podría enfrentar una condena de hasta siete años. Hochman ha prometido actitudes implacables hacia los que busquen sacar provecho de la crisis.
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