Según fuentes del ‘The New York Times’, se prevé la utilización de armamento contra tropas rusas y norcoreanas, en un esfuerzo por defender las fuerzas ucranianas en la región de Kursk. Este movimiento se enmarca dentro de las continuas tensiones en la zona, donde Ucrania busca fortalecer su posición frente a los desafíos militares planteados por Rusia y sus aliados norcoreanos. En este contexto, la cooperación internacional y el suministro de recursos bélicos parecen ser parte de la estrategia para contrarrestar la influencia y avance de las fuerzas adversarias en territorio ucraniano.
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