La Comisión ha anunciado la introducción de una nueva normativa para el sector de la automoción que se publicará este martes, destacando una flexibilización en el calendario previsto para el fin de los motores de combustión. Este cambio responde a diversas presiones de la industria y tiene como objetivo facilitar una transición más gradual hacia tecnologías más limpias, permitiendo a los fabricantes adaptarse de manera más efectiva a las exigencias ambientales sin comprometer su viabilidad económica. La medida forma parte de una serie de ajustes que buscan equilibrar los objetivos de sostenibilidad con las realidades del mercado automotriz.
Leer noticia completa en El Mundo.



