Desde el inicio de las hostilidades el pasado 7 de diciembre, el conflicto ha resultado en la trágica pérdida de al menos 86 vidas. La situación en la región afectada sigue siendo tensa, con las partes implicadas en el conflicto sin dar señales de acercar posiciones hacia una resolución pacífica. La comunidad internacional observa con preocupación, mientras aumentan los llamados a detener la violencia y a proteger a la población civil que se encuentra en medio de esta crisis.
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