La visita del Eintracht de Frankfurt al Camp Nou estuvo marcada por la tensión y los altercados. En su segunda visita histórica al estadio del Barcelona, más de 2.000 aficionados alemanes se hicieron presentes, aunque en menor cantidad que los 30.000 del año 2022. No obstante, volvieron a protagonizar incidentes al encender bengalas, lanzar objetos y romper mamparas. Pese a los esfuerzos del club culé por controlar la situación vendiendo todas las entradas solo a sus socios, algunos fanáticos alemanes lograron infiltrarse entre la afición local, lo que desató enfrentamientos y agravó la rivalidad entre ambas hinchadas, especialmente tras el gol visitante que elevó los ánimos y generó aún más desorden en las gradas.
Leer noticia completa en OK Diario.




