La Universidad de Sevilla ha marcado un precedente histórico al elegir a Carmen Vargas como su primera rectora a través de un proceso de sufragio universal. Este acontecimiento representa un hito en los más de 520 años de existencia de la institución y es el resultado de una campaña estratégicamente planeada y adaptada a los distintos colectivos de la comunidad universitaria.
El equipo de Seis60 acompañó a Carmen Vargas durante varios meses en el diseño de su estrategia de comunicación, la cual estaba fundamentada en una comprensión profunda del proyecto de la candidata y se centró en articular un mensaje claro y coherente. Este mensaje se orientó hacia aspectos estratégicos que reflejaban de manera adecuada la propuesta de Vargas, siempre en armonía con las prioridades y visión del equipo de campaña.
Desde el inicio, la estrategia de comunicación giró en torno a las medidas centrales del programa de Vargas, organizadas tanto por colectivos como por ejes transversales. Este enfoque permitió que cada mensaje resonara con las necesidades reales de la comunidad universitaria, dotando a la campaña de una narrativa coherente y continua. Cada comunicación reforzaba así las prioridades del programa.
Tres valores fundamentales definieron tanto a la candidata como a su proyecto: solvencia, confianza y transformación. La solvencia reflejaba su trayectoria y experiencia de gestión; la confianza se generó mediante una escucha activa y un tono de comunicación cercano y transparente; y la transformación se enfocó en un proyecto ambicioso para modernizar la universidad. Estos valores estuvieron presentes en todas las piezas, mensajes y encuentros, asegurando una comunicación clara y coherente para la comunidad universitaria.
En la primera vuelta de las elecciones, celebrada el 31 de octubre, Carmen Vargas fue la candidata más votada con un 26,6 % de apoyo, seguida por el profesor José Luis Gutiérrez con un 21,9 %. En la segunda vuelta, llevada a cabo el 11 de noviembre, Vargas se confirmó como ganadora con un 50,81 % de los votos ponderados frente al 44,01 % de Gutiérrez.
La participación fue destacada entre algunos grupos: el 78 % del profesorado doctor y el 74 % del personal técnico de gestión y servicios acudieron a votar, mientras que la participación entre estudiantes y personal docente e investigador fue más moderada, alcanzando aproximadamente un 45 % y un 13 % respectivamente.
El resultado electoral refleja la efectividad de un proyecto que ha sabido conectar con la comunidad universitaria a través de una candidata preparada, un programa riguroso y una estrategia de comunicación que puso de relieve sus prioridades y su visión de futuro.
Fuente: Federación Andaluza de empresas cooperativas.
