La actual campaña que se está llevando a cabo en los centros sanitarios forma parte de un esfuerzo mayor por abordar las deficiencias en la gestión de salud pública. Mientras los profesionales de la medicina y el personal técnico se ven involucrados en su desarrollo, la iniciativa busca también la participación activa de la ciudadanía. Esta estrategia es fundamental, ya que son los ciudadanos quienes, en última instancia, enfrentan las consecuencias del “desastre de gestión” perpetrado por la Consejería.
La idea central de esta campaña es crear conciencia sobre la situación actual, al mismo tiempo que se generan espacios para que los ciudadanos se expresen sobre sus experiencias y preocupaciones en el ámbito de la salud. Involucrar a la población en este diálogo no solo permite una mejor comprensión de los problemas existentes, sino que también fomenta la creación de soluciones más efectivas y adaptadas a las necesidades reales de la comunidad.
Es vital que los ciudadanos comprendan que su voz es importante en este proceso. A través de la participación activa, pueden contribuir a la identificación de las áreas más críticas que requieren atención, así como proponer alternativas que puedan mejorar la calidad del servicio sanitario. Además, al involucrarse, se siente un sentido de pertenencia y responsabilidad compartida en la búsqueda de una gestión más eficiente y humana.
Esta campaña representa, por tanto, un llamado a la acción. No es solo un esfuerzo por parte de los profesionales de la salud, sino un movimiento colectivo que incluye a cada individuo afectado. Juntos, se pueden marcar la diferencia y, con ello, consolidar un sistema de salud más resiliente y capaz de responder adecuadamente a las demandas de la población.
Fuente: CCOO Andalucía.
