Lille se convierte en el epicentro cultural europeo con el festival «Fiesta», que se extiende hasta el 9 de noviembre. Celebrando el espíritu hispano, el evento se desarrolla en varios lugares emblemáticos como el Palais des Beaux-Arts, donde se exhiben obras de maestros flamencos como Rubens y Brueghel, reflejando la era del dominio español en Flandes. Maison Folie Moulins y la escultura «ORB» en la Vieille Bourse suman instalaciones que desafían estereotipos. La fiesta también invade las calles, animando lugares históricos y modernos, incluyendo la nueva Euralille, diseñada por arquitectos de renombre. restaurantes, bares y delicias locales completan la atmósfera festiva que espera cambiar percepciones sobre el norte de Francia.
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