La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha criticado la idea de considerar a Estados Unidos como un modelo a seguir debido a sus problemas de drogadicción y valores, al tiempo que defiende su propuesta educativa de crear escuelas preparatorias cercanas a los hogares para facilitar el acceso a la educación media superior. Durante un evento en Querétaro, Sheinbaum subrayó la importancia de acercar los centros educativos a los estudiantes para reducir la deserción escolar, en contraste con la presión del expresidente Donald Trump sobre México para intensificar su lucha contra el narcotráfico. Este enfoque ha generado fricciones entre ambos países, aunque con signos de colaboración en seguridad, como reconoció el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio.
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