Fouad Abdelmoumni, destacado disidente marroquí y defensor de derechos humanos, enfrenta un nuevo proceso judicial en Marruecos tras ser acusado de difamación luego de criticar supuestas acciones de espionaje por parte de las autoridades marroquíes contra Francia. Esta situación se da en un contexto donde Marruecos es criticado por sus prácticas autoritarias y por el uso del software Pegasus para espiar a activistas. Abdelmoumni fue liberado bajo fianza, pero sigue citado para comparecer ante el tribunal en diciembre. A pesar del hostigamiento judicial y mediático, Abdelmoumni mantiene su lucha por un Marruecos democrático, afirmando estar dispuesto a pagar el precio que ello conlleve. Organizaciones como Human Rights Watch han denunciado su detención como una violación del derecho a la libre expresión.
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