La situación de la sanidad en Andalucía continúa siendo motivo de preocupación y movilización por parte de los profesionales médicos. El Sindicato Médico Andaluz (SMA) ha vuelto a la carga con su denuncia sobre el deterioro del sistema sanitario y el olvido por parte de la Administración, tal como lo expresa su presidente, Rafael Ojeda, quien afirma que «sin médicos, no hay sanidad».
Recientemente, alrededor de 200 afiliados del SMA se reunieron en una concentración frente al Palacio de San Telmo, donde se encuentra la presidencia de la Junta de Andalucía. El objetivo de esta movilización fue visibilizar el descontento por la falta de diálogo del Servicio Andaluz de Salud (SAS) y el incumplimiento de los acuerdos establecidos en la Mesa Sectorial, así como señalar los recortes aplicados por el Gobierno andaluz.
Ojeda destacó la carencia de una «verdadera voluntad de negociar» por parte del SAS y la Junta, lo que ha llevado a una situación crítica en la que los médicos se sienten olvidados y desprotegidos. Las reivindicaciones del SMA son claras y urgentes, enfocándose en el incumplimiento del Pacto de limitación de las Agendas de los médicos de Atención Primaria y un recorte del 12% en la productividad abonada a los profesionales.
Además, la concentración también sirvió como plataforma de protesta contra la decisión del SAS de no implementar un nuevo modelo de Carrera Profesional que había sido aprobado durante el año anterior. La falta de una mejora retributiva en la Atención Primaria es otro punto crítico; los médicos continúan siendo los que menos reciben en concepto de formación, responsabilidad y penosidad, por debajo de la media nacional.
El SMA también ha denunciado la exclusión de su organización de las mesas de seguimiento para la mejora de la Atención Primaria, acusando a la Junta de Andalucía de mantener esta situación como un castigo que comenzó con el anterior equipo directivo del SAS y que ha sido intensificado bajo la nueva dirección.
Con estas acciones, el SMA busca no solo hacer oír su voz, sino también llamar la atención sobre un sistema sanitario que, tal como lo expresan sus representantes, corre el riesgo de agravar su estado sin una intervención adecuada y una voluntad real de mejora por parte de la Administración.
Fuente: Sindicato Médico Andaluz.