El presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, se ha abstenido de participar en las sentencias sobre las solicitudes de amparo presentadas por la ex fiscal general Dolores Delgado y el fiscal Eduardo Esteban, después de que sus nombramientos fueran anulados por el Supremo. Esta decisión ocurre tras la recusación realizada por el fiscal José Miguel de la Rosa, que cuestionó la imparcialidad de Conde-Pumpido debido a su precedente relación jerárquica como fiscal general del Estado con las partes involucradas. Pese a no considerar comprometida su imparcialidad, Conde-Pumpido ha decidido extender su abstención a otros casos que afecten a antiguos subordinados suyos en la Fiscalía, asegurando así un balance de magistrados en el pleno del Constitucional, donde el sector progresista mantiene su mayoría.
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