En Cataluña, un conductor de furgoneta fue sancionado por los Mossos d’Esquadra al cometer tres infracciones simultáneamente en la C-25 cerca de Vic: usar el teléfono móvil mientras conducía, no llevar puesto el cinturón de seguridad y retirar las manos del volante, lo que le costó una multa de 600 euros y la retirada de seis puntos del carné de conducir. Este incidente se produce en el contexto de un balance de siniestralidad preocupante durante el primer semestre de 2025, con 69 muertes en 65 accidentes en las carreteras catalanas. Las vías con mayor número de víctimas este año son la AP-7 y la C-58, mientras que la C-25 también registra un alto número de siniestros.
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