En un contexto de creciente preocupación por el medioambiente y la sostenibilidad, el experto en gestión de residuos Javier Clemente ha destacado una inquietante realidad en España: la mayoría de los ciudadanos no sabe reciclar correctamente. A pesar de contar con sistemas de separación de residuos desde hace más de 25 años, el 90% de los españoles desconoce cómo manejar adecuadamente los desechos, según el fundador de la plataforma Todos Somos Reciclaje.
Este desconocimiento se traduce en que solo el 20% de los residuos municipales se separan correctamente, mientras que el 80% restante se recoge mezclado. Con nuevas normativas previstas para 2025, que exigirán tanto a empresas como a particulares adoptar medidas más estrictas de gestión de residuos, el panorama se vuelve preocupante.
Clemente enfatiza que la confusión no se limita a los contenedores más reconocidos —amarillo, verde y azul—, sino que se extiende significativamente a los grises y marrones. El contenedor gris se destina a residuos que no pueden ser reciclados en puntos limpios, mientras que el marrón es específico para residuos orgánicos, un aspecto desconocido para muchos ciudadanos.
La Ley de residuos y suelos contaminados de 2022 trae consigo cinco medidas clave que se implementarán este año, dirigidas a mejorar la gestión de residuos desde la producción hasta el consumo. Una de estas medidas es un nuevo etiquetado en los envases que indicará claramente el contenedor adecuado para su disposición, buscando erradicar la práctica del greenwashing.
Asimismo, la normativa aborda la responsabilidad en la gestión de residuos textiles, un sector altamente contaminante a nivel mundial. Se impondrán regulaciones para que las entidades locales establezcan mecanismos que promuevan la reutilización y el reciclaje de textiles. Además, se subraya la importancia de gestionar correctamente el aceite usado, dado que su mal procesamiento no solo ocasiona contaminación, sino que también puede dañar los sistemas de alcantarillado.
La gestión inadecuada de residuos domésticos peligrosos, como pilas, medicamentos y pinturas, también es un problema frecuente. Las autoridades locales deberán implementar la recogida separada de estos materiales para asegurar un reciclaje seguro, dada su capacidad para causar daños al medioambiente y a la salud pública.
Finalmente, la introducción de una nueva tasa de basuras, basada en el principio de «quien contamina paga», entrará en vigencia en 2025. Este ajuste conllevará un aumento de costos para los hogares, planteando un desafío significativo para los municipios que deberán adaptar sus sistemas de gestión a estas nuevas exigencias.
Con el respaldo de más de medio millón de seguidores en redes sociales, Todos Somos Reciclaje se ha posicionado como un actor crucial en la educación y concienciación sobre la gestión de residuos y la economía circular. Javier Clemente afirma que abordar estos retos es fundamental para garantizar un futuro sostenible en España.