La Diputación de Málaga ha realizado una significativa inversión de 260.000 euros desde 2012 para respaldar proyectos solidarios en la India rural, llevando a cabo estas iniciativas en colaboración con la Fundación Vicente Ferrer y la organización Brazadas Solidarias. Estas acciones, que se centran en mejorar la calidad de vida de las comunidades más desfavorecidas, han permitido la construcción de viviendas dignas para 288 familias, así como el tratamiento y soporte a menores que sufren de cáncer.
Además, se han implementado programas destinados a fomentar la educación secundaria y el bachillerato para niñas, un aspecto crucial para empoderar a las mujeres en estas comunidades. También se ha creado un ‘anganwadi’, un centro de atención infantil que proporciona educación preescolar, controles de salud básicos y programas de nutrición dirigidos a menores, mujeres embarazadas y madres lactantes.
El presidente Francisco Salado ha tenido la oportunidad de visitar la India para conocer las iniciativas apoyadas por la Diputación. En su recorrido, se reunió con Anna Ferrer, presidenta de la Fundación Vicente Ferrer, así como con otros directivos de la fundación. Durante estas reuniones, se discutieron los logros alcanzados y se exploraron nuevas propuestas, incluyendo proyectos que están en marcha en Nepal.
Salado ha expresado su admiración por la «generosidad y humanidad» de todos los involucrados en estos proyectos. Subrayó la importancia de la labor solidaria y de concienciación que se lleva a cabo en la provincia de Málaga, afirmando que es «duro, pero a la vez reconfortante» ver cómo estas acciones generan un impacto tangible y ayudan a combatir problemas como la desigualdad, la discriminación y la pobreza a miles de kilómetros de distancia.
Por su parte, Luz María Sanz Masedo, directora general de la Fundación Vicente Ferrer, agradeció la colaboración constante de la Diputación. Destacó que la confianza depositada en su trabajo ha permitido que muchas personas en situaciones de vulnerabilidad encuentren un camino hacia un futuro mejor, extendiendo ese impacto positivo a sus familias. Sanz Masedo también enfatizó la necesidad de visibilizar la colaboración entre la sociedad civil, las empresas y las administraciones públicas en el ámbito del desarrollo.
El viaje a la India también incluyó la participación de Christian Jongeneel, un destacado nadador malagueño y fundador de Brazadas Solidarias, quien ha promovido la importancia de la solidaridad en el deporte. Esta organización, vinculada a la Fundación Vicente Ferrer, busca fomentar una visión social y solidaria en los eventos deportivos, priorizando la ayuda a quienes más lo necesitan.
Durante su visita, el presidente y su comitiva tuvieron la oportunidad de conocer diversas instalaciones, como el hospital general de Bathalapalli, un centro especializado en la parálisis cerebral, y otros proyectos innovadores que ponen el foco en la igualdad de género, proporcionando a mujeres y niñas un entorno seguro donde puedan desarrollar sus capacidades y derechos.
Desde 2009, Brazadas Solidarias ha organizado cerca de 250 eventos por toda España, recaudando fondos para ayudar a combatir la pobreza y la exclusión social. Este esfuerzo ha permitido que cientos de personas se unan en una causa común, sensibilizando a la sociedad sobre las realidades que enfrentan muchas familias en países como la India.
La colaboración y la acción solidaria que emanan de estos proyectos no solo visibilizan la problemática existente, sino que también muestran que, a través de esfuerzos conjuntos y un compromiso sincero, es posible generar un cambio positivo en el mundo.
Fuente: Diputación de Málaga – Asuntos Sociales.
