La Obra Cultural Balear (OCB) ha expresado su descontento tras la decisión del Ayuntamiento de Palma, gobernado por el PP con el apoyo de Vox, de eliminar el requisito de conocimiento de catalán para optar a 60 plazas en empresas municipales como la EMT, SMAP y Emaya. La OCB considera que esta medida vulnera los derechos lingüísticos y arrincona progresivamente la lengua catalana, calificándola de humillante para los ciudadanos de Palma. Además, critican al gobierno municipal por reducir el valor del catalán al nivel de otras lenguas no oficiales y acusan al PP de traicionar sus compromisos electorales y programáticos, especialmente el acuerdo con Vox. Los partidos de izquierdas e independentistas, que durante años establecieron el catalán como requisito imprescindible, también han mostrado su rechazo a esta medida.
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