A solo dos días de las elecciones en Estados Unidos, más de 75 millones de ciudadanos ya han emitido su voto anticipado, representando casi la mitad del total de participación en las elecciones de 2020. Este aumento significativo viene consolidándose desde la pandemia de COVID-19, sugiriendo un cambio permanente en los hábitos de votación en un país tradicionalmente reacio a votar en días laborables. Aunque no se ha superado aún el récord de 100 millones de votos anticipados de 2020, la tendencia es notable en estados clave como Georgia, Arizona y Carolina del Norte. A pesar de las críticas históricas de figuras republicanas como Donald Trump hacia esta modalidad de votación, que consideraron menos fiable, su aceptación parece crecer, en parte gracias a los demócratas que impulsan la participación adelantada. No obstante, el proceso podría enfrentar retrasos en los resultados debido a limitaciones en el conteo anticipado de votos en varios estados, lo que ocurrió en los comicios pasados con el estado de Pensilvania.
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