El impacto del cambio climático está generando una serie de desafíos que urgen a la sociedad y a los líderes mundiales a tomar medidas inmediatas. Fenómenos meteorológicos extremos, desde incendios forestales devastadores hasta huracanes más intensos y frecuentes, resaltan la urgencia de implementar políticas efectivas de mitigación y adaptación. Mientras tanto, las comunidades más vulnerables enfrentan las peores consecuencias, a menudo sin los recursos necesarios para recuperarse. La comunidad internacional debate sobre la necesidad de un enfoque global coordinado, que no solo limite el aumento de las temperaturas, sino que también promueva una transición justa hacia fuentes de energía sostenibles. La presión recae ahora sobre los gobiernos y las corporaciones para que asuman un papel más activo en la protección del planeta para las generaciones futuras.
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