El Tribunal de Justicia de la UE ha emitido una sentencia trascendental que podría cambiar la situación de los padres con hijos con discapacidad, afirmando que la prohibición de discriminación indirecta se extiende también a ellos. Esta decisión surge tras el caso de una madre italiana que fue obligada a volver a su horario laboral anterior, a pesar de que cuidaba a su hijo dependiente. El tribunal concluyó que esto constituye discriminación laboral por asociación. Expertos señalan que la ley ahora protege también a quienes cuidan de personas con discapacidad, obligando a las empresas a realizar ajustes razonables en horarios o funciones siempre que no impliquen una carga desproporcionada.
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