Dell Technologies ha revelado nuevas capacidades en su AI Data Platform, una iniciativa que busca transformar datos distribuidos y en silos en resultados de IA medibles para empresas. Esta propuesta se centra en separar el almacenamiento y procesamiento, eliminando cuellos de botella y manteniendo el control on-prem, lo que permite flexibilidad para diversas cargas, desde entrenamiento hasta inferencia.
La actualización se sostiene en cuatro pilares fundamentales: motores de almacenamiento, motores de datos, ciberresiliencia integrada y servicios de gestión de datos. Este paquete está integrado con el diseño de referencia de NVIDIA AI Data Platform y se apoya en alianzas con Elastic y Starburst para acelerar búsquedas semánticas y analíticas federadas.
Un punto crucial es cómo Dell busca convertir el caos de los «data swamps» en plataformas de datos capaces de operar en tiempo real. La plataforma abierta y modular unifica tuberías y evita bloqueos, facilitando la conexión sin fricciones de diversos repositorios y acelerando búsquedas híbridas con control on-prem.
Entre los motores de almacenamiento, Dell PowerScale (NAS) y Dell ObjectScale (objeto S3-nativo) destacan por permitir la colocación eficiente de datos y su movimiento sin fricciones entre diferentes etapas de procesamiento. Con mejoras significativas en el rendimiento, como una certificación de NVIDIA para PowerScale, y avances en ObjectScale como S3 sobre RDMA, la plataforma se presenta como una opción potente para el manejo de grandes volúmenes de datos de IA.
En cuanto a motores de datos, se ha fortalecido el ámbito de búsqueda semántica y analítica federada. Utilizando Elastic y Starburst, la plataforma apunta a optimizar la organización y consulta de información en flujos de IA. Además, la integración con NVIDIA cuVS permite búsquedas aceleradas por GPU, prometiendo un rendimiento de nueva generación.
La plataforma de Dell se posiciona como una herramienta integral para simplificar la complejidad de los datos y ofrecer IA «ready» a escala, abarcando sectores que van desde la sanidad hasta la industria. La disponibilidad de estas nuevas capacidades se desglosa en un calendario de hitos que abarcará hasta el primer semestre de 2026, prometiendo avances significativos en la gestión de datos y la eficiencia del almacenamiento empresarial.
