Durante los dos primeros meses de 2025, el clima empresarial en España ha ofrecido un panorama variado, con señales tanto alentadoras como de precaución. Según el más reciente informe del radar empresarial de Experian, el número total de empresas en el país ha crecido en 3.310, pese a una leve ralentización en la creación de nuevas sociedades.
En febrero, se constituyeron 19.946 nuevas empresas, una cifra que refleja una caída del 7,6% en comparación con el mismo mes del año anterior. Sin embargo, a pesar de esta desaceleración en las nuevas constituciones, el saldo neto sigue siendo positivo gracias al balance entre la creación de nuevas sociedades y las disoluciones.
Madrid ha sido protagonista en la creación empresarial, liderando con la constitución de 1.996 nuevas sociedades. Cataluña y Andalucía también han mostrado un notable dinamismo, sumando 1.951 y 1.395 nuevas empresas, respectivamente. Dentro de los sectores, el comercio, especialmente al por mayor y al por menor, junto con la reparación de vehículos, han destacado con la creación de 1.420 nuevas empresas.
Por otro lado, las disoluciones empresariales han presentado una tendencia a la baja, con 6.941 disoluciones registradas en febrero, lo que supone una disminución del 6,3% respecto a febrero del año anterior. Este descenso contribuye a que el número total de empresas disueltas en el balance de enero y febrero sea un 1,62% menor que en el mismo periodo del año anterior.
No obstante, no todo son buenas noticias, ya que la insolvencia ha registrado un incremento notable del 6,4%. Durante los dos primeros meses de 2025, se han iniciado 1.157 procedimientos concursales, frente a los 1.087 del mismo lapso en 2024. Cataluña vuelve a ser destacada, esta vez por registrar el mayor número de concursos, seguida por Madrid y Valencia. El sector del comercio ha sido uno de los más afectados, con un aumento del 22,7% en los procedimientos concursales.
En conclusión, aunque ciertos indicadores muestran un crecimiento en la creación de empresas en algunas regiones y sectores, los problemas relacionados con la insolvencia y las disoluciones continúan siendo desafíos significativos que las empresas deben afrontar en el entorno económico actual. La dualidad de estas tendencias resalta la complejidad del panorama empresarial en España durante el inicio de 2025.
