El conjunto blanco sufrió su novena derrota en la competición europea al caer ante el Zalgiris, que se mostró dominante durante toda la noche gracias a las destacadas actuaciones de Lonnie Walker y Sylvain Francisco. El partido reflejó la incapacidad del equipo para contrarrestar el dinamismo y la efectividad del equipo lituano, quedando a la deriva en una temporada que presenta más desafíos de lo esperado en el ámbito continental.
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