En un fascinante avance botánico, un grupo de científicos ha descubierto que la «Nepeta cataria», comúnmente conocida como hierba gatera, no solo encanta a los felinos, sino que también actúa como un potente repelente natural de ratones. Este hallazgo podría revolucionar la forma en que los hogares abordan el control de plagas de manera ecológica.
Con sus flores violetas y fragancia distintiva, la hierba gatera ha sido cultivada durante siglos por sus efectos sedantes en los gatos. Sin embargo, investigadores de la Universidad de Agricultura y Tecnología han descubierto que el mismo aroma que atrae a estos animales es desagradable para los roedores, manteniéndolos a raya.
El estudio, publicado en la revista «Ecología y Sustentabilidad», destaca cómo esta planta puede ser utilizada en jardines y áreas urbanas, no solo por su valor estético, sino también como una medida efectiva de control biológico de plagas. La investigación mostró que los hogares que incorporaron hierba gatera en sus jardines experimentaron una notable disminución en la actividad de ratones.
Además de su eficacia práctica, la hierba gatera ofrece una opción natural que evita el uso de pesticidas químicos, perjudiciales para el medio ambiente y la salud humana. Este descubrimiento ha captado la atención de jardineros y propietarios en busca de métodos sostenibles para proteger sus espacios.
Los expertos aconsejan plantar esta especie en áreas soleadas y bien drenadas para maximizar su efecto repelente. La hierba gatera también fomenta la biodiversidad, atrayendo a polinizadores como abejas y mariposas, lo que añade un beneficio adicional al ecosistema.
Con su combinación de belleza y funcionalidad, esta planta perenne se presenta como una solución innovadora y sostenible para mantener a los ratones fuera de los hogares, beneficiando tanto a los usuarios como al entorno natural.
