Las Tres Mil Viviendas, en Sevilla, vuelve a estar en el foco mediático tras una operación policial que ha resultado en la incautación de un fusil de asalto Kalashnikov, armas y municiones, vinculadas a tiroteos recientes entre clanes de narcotraficantes. El barrio, considerado el más pobre de España, ha sido escenario regular de violencia armada, lo que ha generado un debate sobre la seguridad y el abandono social. La Policía Nacional ha llevado a cabo macro-redadas en respuesta a una ráfaga de disparos captada el 12 de octubre, aunque el problema de fondo, según líderes comunitarios, sigue siendo la falta de atención gubernamental. A pesar de desmantelar cinco laboratorios de marihuana en las operaciones, no se han realizado detenciones.
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