Los neandertales, anteriormente considerados extintos hace más de 30.000 años, fueron en realidad asimilados por los humanos modernos, según investigaciones recientes. Este hecho ha reconfigurado nuestra comprensión de la historia genética, mostrando que los primeros Homo sapiens ya poseían ADN neandertal. Estos antiguos parientes influenciaron aspectos como el sistema inmunológico y la adaptación a climas fríos en los humanos actuales. Las relaciones entre ambas especies fueron predominantemente patrilocales, con migraciones y mestizaje en tres grandes oleadas. Aunque el legado genético neandertal en los Homo sapiens es modesto, ha dejado una marca notable en la susceptibilidad a ciertas enfermedades autoinmunes. Estos descubrimientos sugieren que la evolución humana es más compleja y entrelazada de lo que se pensaba, implicando una coexistencia y un intercambio cultural significativo entre neandertales y Homo sapiens.
Leer noticia completa en OK Diario.