La Policía y la Guardia Civil han desarticulado una red internacional de tráfico de personas, concretamente de inmigrantes ilegales nepalíes, que eran explotados en condiciones inhumanas como peones agrícolas en varias regiones de España, incluyendo Murcia y Valencia. La operación, denominada FRANCISKAN-EVEREST, detuvo a 11 personas y rescataron a 322 inmigrantes. Se ha descubierto que los inmigrantes eran mantenidos en galerías subterráneas sin condiciones de salubridad en Villalgordo del Júcar y luego trasladados en furgonetas inseguras a trabajar en el campo. A menudo trabajaban 12 horas diarias sin recibir salarios, solo la comida del día. La operación ha sido posible gracias a la colaboración de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y en su fase final, organismos como la Cruz Roja y la embajada de Nepal han asistido a las víctimas. Se ha decretado prisión provisional para seis de los detenidos.
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Desmantelan red de explotación de inmigrantes nepalíes en el sector agrícola a cambio de alimentos
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