Al menos 109 personas han muerto y 161 continúan desaparecidas tras las devastadoras inundaciones en Hill Country, Texas, el pasado 4 de julio. El gobernador Greg Abbott confirmó estas cifras, que han aumentado significativamente tras habilitarse una línea directa para reportar desaparecidos. Las inundaciones han afectado severamente al campamento cristiano de niñas Camp Mystic, donde al menos 27 campistas y monitoras han fallecido. Equipos de rescate, junto a voluntarios y militares, continúan buscando a los desaparecidos entre escombros y lodo. Esta tragedia es la más letal tierra adentro desde 1976 en Estados Unidos. El Servicio Meteorológico había emitido una alerta de inundaciones antes de que el río Guadalupe se desbordara, sorprendiendo a campistas y residentes.
Leer noticia completa en OK Diario.