En el vasto universo de la ingeniería y la construcción, los tornillos son elementos cruciales que aseguran la estructura y funcionamiento de innumerables dispositivos y edificaciones. Sin embargo, más allá de su papel tradicional, estos pequeños componentes también tienen un impacto significativo en el avance de la tecnología, especialmente en el ámbito de la informática. Entre los más famosos y ampliamente utilizados se encuentra el tornillo de estrella, conocido técnicamente como tornillo Phillips.
La confusión en el término popular viene del nombre «tornillo de estrella», que se usa comúnmente para describir por su forma la cabeza del tornillo que permite un encaixe efectivo del destornillador. Sin embargo, su denominación oficial rinde homenaje a su inventor, Henry F. Phillips, quien en la década de 1930 revolucionó el proceso de atornillado industrial. Antes de su invención, los tornillos planos dominaban el mercado, pero a costa de eficiencia, pues era común que el destornillador resbalara de la ranura durante el apriete.
El diseño innovador de Phillips, con una ranura en forma de cruz, no solo mejoró la sujeción, sino que introdujo el concepto de «cam-out». Este resbalón intencional del destornillador al alcanzar un par de apriete específico evitaba el exceso de fuerza que podría dañar tanto el tornillo como el material de soporte. Esta invención no solo optimizó la fabricación de automóviles, sino que también sentó las bases para el uso extensivo en la fabricación en masa de diversos productos.
Con el advenimiento de la informática, el tornillo Phillips se convirtió en una pieza clave para el montaje y mantenimiento de equipos tecnológicos. En particular, los ordenadores y dispositivos electrónicos actuales dependen de estos tornillos para mantener sus componentes internos firmemente sujetos. La capacidad de acceder fácilmente a estas partes internas para reparaciones o actualizaciones ha convertido al tornillo Phillips en el favorito entre técnicos e ingenieros informáticos.
Sin embargo, la evolución tecnológica también ha traído consigo nuevas necesidades en el diseño de tornillos. Aunque el Phillips sigue siendo la elección predominante, especialmente en dispositivos más antiguos, otros tipos de tornillos de seguridad como el Torx han emergido. Estos nuevos diseños buscan prevenir manipulaciones indebidas y exigir herramientas especializadas para acceder al hardware, un movimiento adoptado por empresas como Apple para proteger sus productos.
Finalmente, aunque el tornillo de estrella y el tornillo Phillips son el mismo, reconociendo sus orígenes y características, se destaca su relevancia en la historia y desarrollo de múltiples industrias. Desde revolucionar la manufactura automovilística hasta facilitar la expansión de la tecnología informática, el tornillo Phillips ha asegurado su lugar como un componente esencial que promueve la innovación y el progreso en el mundo moderno.
