La reciente victoria del ultranacionalista George Simion en la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Rumanía ha provocado la renuncia del primer ministro socialdemócrata Marcel Ciolacu, quien ya no considera legítima la coalición gobernante. Simion, que obtuvo el 40% de los votos, competirá con Nicusor Dan, alcalde de Bucarest, por la presidencia el próximo 18 de mayo. La dimisión de Ciolacu deja a su coalición, integrada por el PSD, el PNL y la UDMR, desautorizada, reflejando el rechazo de los votantes al establishment. Tras la repetición de los comicios, anulados previamente por injerencias rusas, la actual elección es crucial para Rumanía, dado su papel estratégico en la OTAN. Simion, crítico con Putin y admirador de figuras políticas conservadoras europeas, promete desafiar la supuesta corrupción política respaldada por Bruselas.
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