La creciente preocupación sobre la vigilancia electrónica destaca que los televisores modernos pueden actuar como grandes espías dentro del hogar, al incorporar micrófonos, cámaras y conexión a Internet que potencialmente permiten el acceso no autorizado a la privacidad de los usuarios. Según Kaspersky, este espionaje ocurre frecuentemente sin el conocimiento del usuario, aprovechando técnicas como el rastreo de hábitos de visualización y vulnerabilidades en dispositivos conectados a la red. Para mitigar estos riesgos, se recomienda revisar y ajustar las configuraciones de seguridad, mantenerse al día con actualizaciones de software, limitar funciones de micrófono y cámara, y desconectar el televisor de Internet si es posible. Adicionalmente, el INCIBE aconseja prácticas como el uso de contraseñas robustas y la gestión cuidadosa de los datos personales.
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