En un escenario global en el que los líderes mundiales calibran cuidadosamente sus interacciones con el presidente estadounidense Donald Trump, las reuniones diplomáticas muestran una mezcla de halagos y tácticas de negociación para evitar conflictos. Durante la cumbre de la OTAN en La Haya, personalidades como Pedro Sánchez y Volodímir Zelenski fueron fotografiados con Trump, mientras otros, como el primer ministro británico Keir Starmer, entregaron invitaciones reales. Estas estrategias buscan mantener el diálogo abierto con el inquilino de la Casa Blanca, cuyas decisiones, como la imposición de aranceles a México, siguen generando reacciones internacionales.
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