Emmanuel Macron, presidente de Francia, se encuentra en una encrucijada política tras la dimisión de su último primer ministro, Sébastian Lecornu, quien duró solo 27 días en el cargo. Con tres bloques en la Asamblea Nacional y un escaso apoyo del 22% en las encuestas, Macron enfrenta un gobierno paralizado y una creciente presión para convocar elecciones anticipadas. Los socialistas exigen retirar la reforma de la edad de jubilación y aplicar un impuesto a las grandes fortunas. Mientras tanto, el bloque de Reagrupación Nacional de Marine Le Pen y Jean-Luc Mélenchon se distancia del presidente. Con una deuda nacional del 116% del PIB y la reprobación de los mercados financieros, la popularidad de Macron se desploma, poniendo en duda su legado de reformas proeuropeas iniciado en 2017.
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