El Tribunal Supremo ha resuelto una disputa legal de once años, ordenando a Cataluña devolver las pinturas murales del monasterio de Sijena a Aragón. Las 43 pinturas, retiradas durante la Guerra Civil para protegerlas, estaban en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) sin retorno previsto. Esta decisión representa un revés para el movimiento independentista catalán, que había resistido el regreso de estas obras por sus implicaciones territoriales. Jorge Azcón, presidente de Aragón, celebró la sentencia, resaltando su importancia para el Estado de Derecho. Las obras, declaradas Monumento Nacional, podrían recibir visitas nuevamente tras la restauración del monasterio.
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