Una investigación llevada a cabo en Japón ha identificado tres componentes químicos que experimentan un aumento durante el período ovulatorio en las mujeres, lo que transforma el olor del sudor de las axilas de un aroma avinagrado a uno más fragante. Este hallazgo podría tener implicaciones en la comprensión de cómo los cambios hormonales influyen en la percepción del olor corporal, abriendo nuevas vías para el desarrollo de productos de cuidado personal y salud femenina.
Leer noticia completa en El Mundo.