El Gobierno ha aprobado una transferencia de 2.084 millones de euros destinada al sector defensa, decisión que ha generado oposición dentro del Consejo de Ministros por parte del ala minoritaria de Sumar. Según la ministra de Sanidad, Mónica García, aunque se presentaron observaciones, la discrepancia fue calificada de «sana». Esta transferencia, según la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, no es un nuevo gasto, sino parte de compromisos adquiridos previamente que no alterarán el porcentaje del PIB destinado a defensa, manteniendo el objetivo de alcanzar un 2% del PIB tal como se comprometió España con la OTAN. Alegría ha subrayado que se busca modernizar y mantener los efectivos sin aumentar el porcentaje actual del 1,2% del PIB. Mientras, el gobierno insiste en que se trata de una gestión presupuestaria prevista por la falta de un presupuesto nuevo, lo que ha requerido un ajuste técnico sin incrementar el gasto real.
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