El Gobierno ha anunciado un aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de al menos un 3,1%, lo que posicionará esta medida por encima del 60% del salario medio en el país. Esta decisión, alineada con las recomendaciones de organismos internacionales, busca mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores con menores ingresos y reducir la brecha salarial. Asimismo, se espera que esta medida tenga un impacto positivo en el consumo interno y contribuya a dinamizar la economía en un contexto de recuperación económica. Los sindicatos han expresado su apoyo, mientras que algunas organizaciones empresariales advierten sobre posibles repercusiones en los costes laborales y el empleo.
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