El Gobierno propone la separación de símbolos religiosos en el Valle de los Caídos en su plan de desacralización

El Gobierno de España está avanzando en su proyecto para llevar a cabo la «resignificación» del Valle de los Caídos, una iniciativa que implica una inversión de 30 millones de euros. Este plan busca transformar el emblemático recinto, incluyendo la Gran Cruz, la basílica y áreas adyacentes, en un espacio dedicado a la memoria y reconciliación. El proyecto contempla intervenciones artísticas y museográficas, preservando únicamente ciertas áreas dedicadas al culto religioso. El centro de interpretación, definido como el eje pedagógico del proyecto, tiene como objetivo educar sobre la historia del monumento y su relevancia histórica. No obstante, la Conferencia Episcopal Española ha expresado su desacuerdo, señalando que la iniciativa del Gobierno se ha llevado a cabo sin su colaboración, lo cual podría comprometer los espacios y la sensibilidad religiosa existentes, y ha subrayado la importancia de respetar los acuerdos vigentes con la Santa Sede respecto a las funciones litúrgicas del lugar.

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