La ceremonia del Premio Nobel de la Paz en Oslo comenzó con la emotiva interpretación de «Alma Llanera» por Danny Ocean, en honor a la disidente venezolana María Corina Machado, quien no pudo asistir pero fue representada por su hija, Ana Corina Sosa Machado. Este reconocimiento subraya la lucha por la democracia en Venezuela, un país rico en petróleo pero sumido en corrupción y represión bajo el régimen de Nicolás Maduro. Jørgen Watne Frydnes, líder del Comité Nobel, destacó las graves violaciones de derechos humanos en Venezuela, instando a la renuncia de Maduro y el reconocimiento del presidente legítimo Edmundo González Urrutia. El premio, dedicado a los venezolanos que anhelan un futuro libre, resalta la movilización pacífica y la presión internacional como herramientas esenciales para el cambio democrático. María Corina Machado, aún en camino a Oslo, se espera logre reunirse con su familia después de años de separación, en un evento que simboliza esperanza para Venezuela.
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