En España, las setas comestibles, apreciadas sobre todo en los meses fríos, deben limpiarse con un trapo o cepillo suave, en lugar de lavarlas con agua, para evitar que absorban líquido y pierdan sabor, según el nutricionista Pablo Ojeda. Este enfoque conserva las propiedades organolépticas de las setas, transformándolas en un alimento valioso y saludable. Aunque bajas en calorías, su digestión puede ser difícil, por lo que se aconseja moderar su consumo, especialmente en cenas, para quienes tienen estómagos delicados. Ojeda sugiere prepararlas en revueltos con yema de huevo, rica en vitaminas y grasas saludables, desmitificando así su fama negativa.
Leer noticia completa en 20minutos.