En una reciente declaración, el Papa León XIV enfatizó la importancia de proporcionar un espacio seguro y accesible para las víctimas de abusos, subrayando que deben tener la posibilidad de expresarse libremente sobre sus experiencias. Esta afirmación se enmarca en un contexto cada vez más exigente respecto a la transparencia y el apoyo institucional hacia quienes han sido violentados, destacando la necesidad de implementar medidas que fomenten la confianza y aseguren que las denuncias de abusos sean escuchadas y tramitadas adecuadamente. La postura del pontífice refuerza los esfuerzos de la Iglesia en abordar estos graves problemas, buscando proveer un amparo esencial para las víctimas.
Leer noticia completa en El Mundo.




